¿Qué sucede con los globos?
Si
inflamos globos y los dejamos al sol, ¿qué sucede?
Dentro
de los globos hay aire, que es una mezcla de gases. El sol aporta energía que
hace que las partículas de gas se muevan más rápido y aumente su temperatura.
Al moverse más rápido, tienden a ocupar más lugar, aumentando su volumen.
Con
el látex sucede algo similar, pero como es un sólido, su tamaño no cambia tanto
como el de los gases. Por esa razón, los gases empujan cada vez más las paredes
del globo (aumenta la presión), hasta que el látex ya no puede ceder más y el
globo explota.
Si
el globo se expone al descenso de temperatura (por ejemplo, si a la noche no
los guardamos), las partículas de los gases que forman el aire se mueven menos,
la temperatura también desciende y el gas ocupa menos espacio. El látex del
globo también se contrae un poco, pero no tanto como el aire. Por eso, a la
mañana, veremos que los globos parecen arrugados y más chiquitos.
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